La minería latinoamericana enfrenta un panorama complejo, marcado por desafíos geopolíticos y medioambientales, así como un aumento en los costos de producción. Sin embargo, a pesar de estas incertidumbres, Chile y Argentina miran hacia el futuro con optimismo, preparándose para un impacto continuo y buscando oportunidades de crecimiento.
Desafíos globales y regionales
La minería en Latinoamérica se ve afectada por la inflación desenfrenada que obstaculiza el desarrollo de proyectos y eleva los costos en toda la industria. Además, la invasión rusa en Ucrania ha disparado los precios del gas natural, el diésel y la energía, lo que, junto con el aumento en los costos de materiales como equipos y acero, complica aún más el escenario.
A pesar de estos desafíos, Chile y Argentina mantienen una perspectiva positiva. Argentina, con una exportación de divisas de USD 3800 millones en 2022, prevé triplicar esta cifra, impulsada principalmente por proyectos de litio y cobre. Por su parte, Chile espera un crecimiento del 6% en el sector, impulsado por el aumento de producción en proyectos clave como Quebrada Blanca, Pelambres y Escondida.
Proyectos mineros en Argentina
En Argentina, el proyecto de litio Cauchari-Olaroz en la provincia de Jujuy se ha establecido como un hito significativo en la industria minera del país. Con una inversión considerable de USD 852 millones, este proyecto se centra en la producción de carbonato de litio, un componente esencial para las baterías de tecnología avanzada.
La ubicación estratégica del proyecto en el salar de Cauchari-Olaroz no solo representa una ventaja geográfica sino también un potencial enorme para posicionar a Argentina como un jugador clave en el mercado global de litio, un recurso cada vez más demandado en el ámbito de la energía renovable y la movilidad eléctrica.
El proyecto Cauchari-Olaroz, operado por Minera Exar, ha realizado su primera exportación de carbonato de litio, marcando un hito importante en la industria minera de Argentina. Se espera que para 2024, este proyecto duplique la capacidad de producción de litio en Argentina.
Por otro lado, el proyecto Los Azules, operado por McEwen Copper, emerge como una promesa significativa en el sector del cobre, situándose entre los depósitos más grandes sin desarrollar del mundo. Con una inversión proyectada de USD 35 millones para la temporada de exploración 2022/2023, Los Azules se encuentra en una fase crucial de desarrollo. Ubicado en la provincia de San Juan, este proyecto no solo impulsa la economía local a través de la inversión y la creación de empleo, sino que también promete contribuir significativamente al mercado global de cobre, un metal esencial para la infraestructura moderna y las industrias de alta tecnología.
Avances en Chile
En Chile, el proyecto Quebrada Blanca Fase 2 (QB2) sobresale como uno de los recursos de cobre más grandes y no desarrollados a nivel mundial. Incluye una concentradora y nuevas instalaciones, con una inversión estimada entre USD 7400 millones y USD 7750 millones.
La minería en Latinoamérica se ve afectada por la inflación desenfrenada que obstaculiza el desarrollo de proyectos y eleva los costos en toda la industria
Impacto económico y futuro
Estos desarrollos representan una dinámica positiva para la economía de ambos países. En Argentina, la minería del litio está generando un impacto significativo, con inversiones millonarias y un aumento considerable en las exportaciones. Mientras tanto, Chile continúa consolidando su posición como líder en la producción de cobre a nivel mundial.
A pesar de los retos presentes, Chile y Argentina avanzan con confianza hacia el futuro, demostrando que la minería en Latinoamérica sigue siendo un sector vital y lleno de oportunidades.
